En 2013 el Área de Acción Social del Ayuntamiento de Bilbao, las Asociaciones de personas Mayores de Bilbao y el Grupo Servicios Sociales Integrados S. Coop., ponen en marcha el Programa Mirada Activa, que hoy es MiradActivaBerria y que busca la participación de los Administradores de Fincas Colegiados como agentes clave en la detección de situaciones de fragilidad social. Para explicar cómo surge y cómo funciona este programa se impartirá una Webinar el próximo 3 de noviembre a las 9:30h. dirigida a Administradores de Fincas Colegiados.
La inscripción se realizará a través de la web www.cafbizkaia.com
Entrevistamos a Marian Pérez de Albéniz del Val, de la Jefatura Negociado de Asociaciones y Mayores del Ayuntamiento de Bilbao, e Isabel Massa, del Grupo SSI.
«Pedimos a los Administradores de Fincas Colegiados que difundan los servicios del programa MiradActivaBerria y que comuniquen aquellas situaciones de fragilidad social en personas mayores que puedan detectar»
¿Cuándo surge el programa MiradActivaBerria?
En el año 2013, la Comisión de Mayores perteneciente al Consejo de Bienestar Social del Ayuntamiento de Bilbao plantea una preocupación compartida en relación a la soledad de las personas mayores y el voluntariado. Es entonces, cuando desde el Área de Acción Social del Ayuntamiento de Bilbao, las Asociaciones de personas Mayores de nuestro municipio y el Grupo Servicios Sociales Integrados S. Coop., ponen en marcha el programa Mirada Activa (MA) dirigido a la identificación de personas mayores que se encontraban en situación de soledad y/o en otras situaciones de riesgo a través de la creación de una red activa de mayores. Con la participación de las asociaciones de mayores del municipio de Bilbao se consiguió crear una amplia red de voluntariado erigiéndose en “antenas sociales” que detectaban, en su entorno inmediato, personas mayores en situación e fragilidad social.
Este programa se ha ido consolidando a lo largo de los 8 años en los que ha sido difundido en Bilbao siendo conocido por la ciudadanía y por las y los profesionales.
¿Cuál ha sido la trayectoria?
Tras realizar un intenso trabajo con todas las asociaciones de personas mayores de Bilbao y conseguir crear la red activa de mayores, en el año 2016, ampliamos esta red de detección a otros colectivos. En concreto, realizamos una intensa campaña dirigida a la ciudadanía y nos acercamos a entidades y asociaciones que trabajan con el colectivo de personas mayores. Al año siguiente iniciamos un proceso de detección activa a través de las entradas en los domicilios de personas mayores puerta a puerta para identificar posibles situaciones de fragilidad social. En mayo del 2018, con el objetivo dar un paso más y paliar estas situaciones, comenzamos con la puesta en marcha de Nagusikafegunean, espacios de café amigables.
En el año 2020, llega la pandemia y afloran muchas situaciones de fragilidad social a las que es preciso dar respuesta. Mirada Activa se convierte en el actual MiradActivaBerria dotándose de mayores recursos y constituyéndose en un programa de mayor entidad. Nace con un objetivo claro que es ofrecer a las personas mayores una propuesta integrada de los recursos y servicios propios del Área de Acción Social y otros recursos. Para ello se han estructurado una serie de acciones dirigidas a dar respuesta a las diferentes necesidades del colectivo de personas mayores de Bilbao. En concreto, se ha ampliado la red de cafés amigables a todos los distritos de Bilbao, se ha puesto en marcha un programa de salidas semanales de ocio y cultura y se han organizado cursos de capacitación en digitalización dirigidos a las personas mayores. Además, se incluye un innovador servicio para la participación comunitaria gracias al cual las personas mayores cuentan con el apoyo de una conectora social para abordar la prevención de situaciones de soledad y fragilidad facilitando la creación de vínculos de la persona con su entorno próximo.
La detección de las situaciones de fragilidad social es una de las dificultades mayores ¿Qué hacéis desde MiradActivaBerria?
Nos mantenemos en la idea de continuar trabajando con las asociaciones de personas mayores, organizaciones sociales y la propia ciudadanía ya que constituyen una red de “antenas sociales” fundamental para la detección de posibles situaciones de fragilidad social. Para ello, a las personas que ejercen de antenas se les dota de estrategias y herramientas para, por un lado visibilizar el proyecto en su entorno próximo y, por otro, canalizar la información de las posibles situaciones de fragilidad social, soledad y aislamiento social y otras situaciones de riesgo que sean detectadas.
Además, contamos con un equipo técnico especializado que realiza entrevistas que permiten valorar el nivel de fragilidad social en el propio domicilio de las personas mayores. La entrevista permite, además, informar y asesorar de primera mano sobre programas y recursos municipales, entre ellos todos los incluidos en el programa MiradActivaBerria.
¿Por qué habéis pensado en los administradores de fincas para la detección de situaciones de fragilidad social?
El éxito en la detección de personas en situación de fragilidad social requiere de la implicación de un número de agentes que, en mayor o menor medida, ejerzan de “antenas” y permitan identificar situaciones de soledad. Se trata de una intervención multinivel en la que cada agente puede realizar tareas de detección en función de sus características y capacidades.
Este año vamos a realizar una apuesta importante por trabajar con las farmacias, administradores de fincas y salud porque nos parece que son agentes clave en la detección dado su conocimiento y cercanía a las personas mayores. Para ello tenemos previsto implicar, inicialmente, a las personas profesionales que trabajan en los distritos de Rekalde y Basurto-Zorroza. Esperando que la colaboración sea lo más exitosa posible.
¿Cómo pueden los administradores de fincas colaborar con el proyecto?
La idea es que no suponga un trabajo añadido a su tarea diaria, sino que simplemente pedimos a las empresas asociadas al Colegio de Administradores de Fincas que difundan servicios como los cafés amigables, las salidas de ocio y cultura y los cursos de digitalización dirigidos a personas mayores. Además, en aquellas situaciones que consideren preocupantes desde su punto de vista (malas condiciones de habitabilidad de la vivienda, imagen descuidada de la persona mayor, escasas interacciones y aislamiento de la persona en su domicilio, no dispone de nadie de confianza en su entorno que le pueda echar una mano,…) que en muchas ocasiones se detectan desde la vecindad sean derivadas al programa.
También nos parece muy importante hacer hincapié en que no se trata en ningún caso de invadir el espacio de la persona sino de apoyarla. La propia derivación a los cafés o las salidas son un paso muy importante para conseguir enganchar a la persona al programa. En este sentido, agradecemos enormemente la posibilidad de colaborar con el Colegio de Administradores de Fincas para conseguir detectar el mayor número de situaciones de fragilidad social ya que entendemos que la soledad es un problema social al que debemos dar respuesta desde la propia sociedad.