El pasado 23 de noviembre tuvo lugar en el Hotel Ercilla de Bilbao la jornada jurídica sobre “La Morosidad en Las Comunidades de Propietarios” dirigida a los Administradores de Fincas Colegiados de Bizkaia.
La jornada fue impartida por Doña Paula Boix Sampedro, licenciada en Derecho por la Universidad Autónoma de Madrid. La Sra. Boix ingresó en la carrera judicial en el año 2003 y, desde el año 2010, desarrolla sus funciones en el Juzgado de Primera Instancia nº 13 de Bilbao (exclusivamente en la jurisdicción civil). Acompañaron a la Sra. Boix en la mesa presidencial, las magistradas Doña Ana García Orruño y, Doña M.ª Cruz Aparicio Redondo.
La sesión fue inaugurada por D. Pablo Abascal, presidente de la Junta de Gobierno y por Dña. M.ª Paz Ramos vicepresidente de la Junta de Gobierno y responsable de formación.
La jornada fue un éxito, la ponente Doña Paula Boix expuso de una manera sencilla y clara las principales cuestiones que rodean la morosidad en las Comunidades de Propietarios: las sanciones al propietario moroso, la reclamación judicial de la deuda, el proceso monitorio y la preferencia crediticia. Al final de la jornada se abrió un interesante debate entre todos los asistentes.
En esta ocasión, El Colegio contó con la colaboración de HOMEBI (Holding Mediador Bilbaíno Mediador de Seguros), la correduría de seguros que gestiona las pólizas de RC y Caución de los colegiados. Acudieron por parte de Homebi, Dña. Libe Astigarraga y D. Carlos Uribe. La Sra. Astigarraga se dirigió a nuestros colegiados para informarles sobre los riesgos cubiertos y excluidos de las pólizas contratadas, las sumas aseguradas y, por último, la gestión de la siniestralidad.
Acudieron más de 90 colegiados, miembros de la Junta de Gobierno; y contamos además con la presencia de D. Marco Lamberti –Director General de COUTOT ROEHRIG ESPAÑA– la primera empresa de genealogía sucesoria y localización de herederos del mundo, con quien EL COLEGIO ha firmado un acuerdo por el cual, nuestros colegiados pueden desbloquear la gestión de las masas hereditarias que, por falta de herederos designados, no han sido reclamadas, ayudando así a gestionar la morosidad de las Comunidades de Propietarios.